El Senado ha aprobado este jueves suspender el conflicto de atribuciones que planteó al Congreso hace un mes, desistiendo de que lo resuelva el Tribunal Constitucional (TC), con los votos solo del PP, que tiene mayoría absoluta, y sin que la mayoría del resto de senadores hayan participado de la votación.

La decisión, que supone dejar sin efecto el conflicto aprobado el 10 de abril, ha contado con 140 votos a favor, uno en contra y dos abstenciones, después de haber anunciado la mayoría de los grupos parlamentarios que no iban a participar de la votación.

El conflicto fue planteado para pedir al Congreso que retirase la proposición de ley de amnistía por un defecto formal, ya que supuestamente era inconstitucional, pese a que en esa fecha ya estaba siendo tramitada por la Cámara Alta, que esta semana la ha devuelto a la Cámara Baja con un veto que tendrá que levantar.

El Senado ha perdido la posibilidad de elevar un conflicto entre órganos constitucionales ante el TC, que hubiese sido el primero de la historia, aunque la opción iba a decaer de todas formas este jueves, al cumplirse un mes del plazo abierto desde que la Mesa del Congreso contestó negativamente a la solicitud de retirada de la ley.

Deciden "plegar velas" por su equivocación anterior

En el debate previo a la votación, todos los portavoces han criticado al PP: la de Vox por echarse atrás en el conflicto sin acudir al TC y los de los demás grupos por haber convocado un pleno innecesario para tomar esta decisión de "plegar velas" por lo que consideran su equivocación anterior.

El senador del PP Antonio Silván ha culpado a la Mesa del Congreso de que el Pleno del Senado tuviera que dejar sin efecto su acuerdo de plantear el conflicto, tomado el 10 de abril, por haber evitado que fuera el Pleno de la Cámara Baja el que contestase al requerimiento de retirada de la ley.

"Si la Mesa del Congreso no cumple la ley desde el PP estudiaremos las acciones que en derecho nos pudieran corresponder", ha anunciado Silván, tras indicar que aunque se deje sin efecto el requerimiento a la Cámara Baja, seguirán "esperando que el Pleno del Congreso conteste" y no renunciarán a todos los recursos a su alcance.

Por el PSOE, el senador canario Manuel Fajardo ha apuntado a que el PP estaba "asustado" ante la posibilidad de ir al TC, que ni admitiría a trámite el conflicto entre órganos, del mismo modo que tampoco han presentado un recurso de amparo, como hubieran hecho si de verdad creyesen que la ley de amnistía es inconstitucional.

Fajardo ha destacado además que al PP le ha "traicionado el subconsciente" en su propuesta, pues la han planteado para suspender y dejar sin efecto su acuerdo anterior, cuando jurídicamente algo se deja sin efecto cuando se revoca, no cuando se suspende; por lo que, aunque lo llamen suspensión, supone una revocación.

Fuentes del PSOE han añadido más tarde que el PP ha hecho finalmente en el Senado un "reconocimiento de facto de la constitucionalidad" de la ley de amnistía.

En el debate, Paloma Gómez,senadora de Vox, la única que ha votado en contra, ha dicho que no quería participar de la "ceremonia de la confusión" del PP, y ha advertido a ese partido de que "si no lucha hasta el final para evitar que salga adelante la ley" le considerará "cooperador necesario" de la amnistía.

La senadora de Vox cree que en el PP "se escudan en cuestiones de plazo y estrictamente formales", pero lo que tenían era "una estrategia", la de "decir una cosa en campaña" para las elecciones catalanas, y "hacer otra después".

Uxue Barkos, de Geroa Bai, ha resumido que el PP con la convocatoria de este pleno ha tenido "la torpeza política de poner el foco sobre su propia equivocación", al "plegar velas", mientras Carla Antonelli, de Más Madrid, ha apuntado que el PP sigue con "la utilización maniquea" de su mayoría en el Senado para sus intereses.

En la misma línea, la portavoz del PNV, Estefanía Beltrán de Heredia, ha lamentado que el resto de grupos sean "actores secundarios" de "la filfa y auténtica tomadura de pelo" de que se haya convocado un pleno para esto, cuando todos sabían antes que el PP "no tenía intención de ir al Tribunal Constitucional".

"Tenían soplándoles al oído a las personas de Vox que llevan en el tándem", ha conjeturado la senadora del PNV como causa de que el PP anunciara a finales de marzo que plantearía el conflicto.

Aquello fue "una improvisación", a juicio del portavoz de Junts, Josep Lluís Cleries, con la que el PP ha hecho "el ridículo absoluto al guisarse y comerse ellos solos" el inicio y el fin de un conflicto con la otra cámara legislativa.

Fuentes del grupo que forman ERC y EH Bildu, cuyos portavoces no han intervenido, han indicado que el PP ha demostrado que el conflicto no tenía base jurídica.